sábado, 23 de octubre de 2010

China quiere estar verde


China, el país que más energía consume del mundo, se ha marcado el objetivo de reducir su intensidad energética (la cantidad de energía que utiliza para generar cada dólar de su PIB) en un 17,3 por ciento de 2011 a 2015 respecto a los niveles de 2010, según ha afirmado un responsable de la Administración Nacional de la Energía, Huang Li.

China pretende elevar la proporción de combustibles no fósiles dentro del consumo energético total hasta un 15 por ciento en 2020. En 2009 representaron menos de un 9 por ciento.

Estas declaraciones se unen a los esfuerzos de China por enverdecer su imagen. Entre los proyectos más ambiciosos anunciados en 2010 está la ampliación, hasta alcanzar 400 millones de hectáreas en 2050, de la que ya es la mayor selva artificial del mundo.

La Gran Muralla Verde, como es conocida la selva artificial levantada en China para detener el rápido avance del desierto, cubre actualmente más de 500 mil kilómetros cuadrados.

El gobierno subraya la importancia del bosque para combatir décadas de daños ambientales, pero la campaña oficial tiene varios detractores. Los críticos sostienen que las especies plantadas y su ubicación limitan la efectividad de la iniciativa y que, de hecho, la Gran Muralla Verde contribuye con el significativo declive de la calidad del bosque. Recalcan que, además, que varios especialistas coinciden en que muy pocos animales se adaptan.

Los beneficios de la reforestación son evidentes, según sus defensores, porque ayudan a frenar el rápido avance del desierto en el oeste y norte del país.

Vía: Ecoperiodico

No hay comentarios:

Publicar un comentario